La envidia es mala, muy mala,te mata por dentro, te destroza el corazón...Es fuego y arde. Es mil veces más terrible que el hambre, porque es hambre espiritual.
No todos podemos permitirnos las mismas cosas (que no debería ser así), pero a quien le toque le tocó, esto es como el huevo Kinder, que nunca sabes que va a salir hasta que lo abres.
Nadie es más, ni menos que nadie. Si alguien se siente así es porque quiere, porque las palabras no tienen el poder de herir, a no ser que quien te lo diga sea una persona querida.
Quierete y te querrán, lucha por tus sueños, mata con tus logros a quien te dijo que no lo conseguirías, porque este mundo es de los que logran lo que quieren.
¿Envidia? Ni quererla, ni temerla.
By Lexy Braun.
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