Hay gente que trata fatal a sus abuelos, esos que no piensan que tienen suerte de tenerlos.
Mis cuatros abuelos están muertos. Sé que como yo habrá mucha gente, y sentirán cosas diferentes al pensar en estos. Mi último abuelo vivo murió cuando yo tenía cinco años, aunque nadie lo sabe lo pase mal cuando me enteré, estaba muy apegada a él, y aunque a los otros no los llegué a conocer mucho los extraños, extraño sentir su calor, su cariño, su alegría por mis logros, añoro sus hombros en los que poder llorar y pedirle consejos.
Y es que aunque nunca me haya faltado nada, ellos sí, y duele, mucho... Y por ellos es que sigo adelante porque sé que desde allá arriba me están cuidando y viendo, y voy a lograr todo lo que me proponga por ellos...
By Lexy Braun.
No hay comentarios:
Publicar un comentario